Las plataformas vecinales y las organizaciones nacionales e internacionales que forman parte de esta Coordinadora celebramos la moratoria aprobada en Navarra a las explotaciones de vacuno industrial al tratarse de la primera vez que un gobierno regional aprueba una moratoria de este tipo. Al tratarse de un problema que afecta a todo el Estado español, sería deseable que cundiera el ejemplo en otras Autonomías y que esa moratoria no se aplicara únicamente al vacuno industrial, sino a toda la ganadería industrial, y que no se limitara a un tamaño determinado, sino que se guiara por el método de producción.
El Pleno del Parlamento de Navarra ha aprobado el 29 de abril de 2021 una proposición de ley Foral por la que se modifica la vigente ley de Sanidad Animal de Navarra, con el objetivo de establecer una moratoria para las concesiones de nuevas explotaciones industriales de vacuno o ampliación de las existentes con una capacidad superior a 1250 unidades de ganado mayor. Dicha moratoria finalizará el 30 de mayo de 2022 y entretanto se redactará una nueva ley de Sanidad Animal que blinde a Navarra ante los impactos sociales, económicos, ambientales y de sanidad animal originados por el modelo de ganadería industrial.
En el debate parlamentario, ha quedado clara la necesidad del fomento de la ganadería extensiva y el apoyo a la ganadería sostenible, que es la única posibilidad de fijar población rural, crear empleo y producir alimentos de calidad velando por la salud pública, el medioambiente y los paisajes, así como el bienestar de personas y animales. Se reconoce que deben cumplirse los objetivos marcados en el Pacto Verde Europeo y la Estrategia de la Granja a la Mesa, algo que debería ser un objetivo común en todo el Estado español. El modelo actual de ganadería industrial es insostenible y nos aleja tanto de estos objetivos como de los compromisos climáticos e incluso del cumplimiento de la Directiva de Nitratos, por la cual la Comisión Europea tiene un expediente de infracción abierto contra España.
Ante la proliferación desmesurada y descontrolada de la ganadería industrial en el Estado español, el incremento de los problemas ambientales y de salud pública, así como la creciente oposición social a este modelo, las demás Comunidades Autónomas deberían también poner en marcha moratorias a la ganadería industrial e iniciar la transición hacia el modelo de ganadería extensiva y ecológica.